La vida de las mujeres está marcada por los altibajos hormonales, que también afectan a su estado de ánimo. ¿Cuándo son normales estos cambios de humor y cuándo hay que estar atentos? Un especialista lo explica en una entrevista con Infobae
17 de marzo de 2014.
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La vida de una mujer puede variar drásticamente en función de las distintas variables que la afectan, como la cultura en la que está inmersa, su estilo de vida, su estado civil y sus preferencias. Sin embargo, hay un factor que afecta a todos ellos: el papel que desempeñan las hormonas en los cambios de humor.
Los altibajos hormonales en la mujer, incluso más que en el hombre, marcan el paso de los distintos ciclos de su vida. Desde el inicio de la pubertad hasta la menopausia, las mujeres experimentan cambios en su cuerpo que están estrechamente relacionados con su sistema hormonal, y estas mismas fluctuaciones pueden afectar al estado de ánimo de la mujer. Esto se debe a que las hormonas afectan a la acción de los neurotransmisores, moléculas que transmiten información de neurona a neurona, y éstas afectan al estado de ánimo.
Ya al principio de la pubertad, los niveles de las hormonas estrógeno y progesterona aumentan, y estas liberaciones hormonales suelen provocar alteraciones emocionales.
Una vez que comienza el ciclo menstrual de 28 días, las mujeres suelen experimentar dos fases distintas de cambios de humor: la fase folicular y la fase lútea. La primera corresponde a los días previos a la ovulación y se caracteriza por el predominio del estado de alerta, el deseo y el instinto sexual para estimular la fecundación. Esto es lo que hace que las mujeres se sientan más atractivas y de buen humor.
Si no se produce el embarazo, la segunda fase se caracteriza por un aumento de la temperatura corporal, tensión mamaria, distensión abdominal, retención de líquidos, tránsito lento y estreñimiento, sequedad genital, labilidad emocional y cambios en el apetito.
Alrededor de los 45 años comienza la menopausia, una etapa de la vida de la mujer en la que la menstruación cesa y puede durar cinco o más años. Para algunas mujeres, estos cambios traen consigo gran ansiedad, irritabilidad e insomnio. Otros síntomas relacionados con el estado de ánimo que pueden experimentar las mujeres son la ansiedad y la depresión.
Cuándo estar alerta
Aunque es normal que las mujeres experimenten cambios de humor debido a su ciclo menstrual, la disfunción tiroidea puede afectar al estado de ánimo de la mujer e incluso a su calidad de vida.
Este es el caso de la deficiencia de serotonina: un descenso de los niveles normales puede provocar ansiedad, obsesión, irritabilidad, nerviosismo, tristeza, depresión, mal humor, aislamiento y baja autoestima. Estos síntomas suelen aparecer diez días antes de la menstruación y van acompañados de dolores de cabeza, retención de líquidos, aumento de peso, problemas para dormir por la noche y antojos de dulces o chocolate en exceso.
También es importante ser consciente de la incidencia de la depresión durante la menopausia y el posparto, especialmente en personas que ya han sufrido esta condición en otro momento de su vida. Por lo tanto, vale la pena hacer ejercicio durante estos cambios hormonales, ya que la actividad física provoca la liberación de endorfinas, hormonas asociadas al bienestar psicofísico y al placer.
Aunque la sensibilidad suele ser una característica femenina, es importante consultar a un endocrinólogo cuando estos cambios de humor son inusuales y afectan a la calidad de vida.
