regalo de bodas letra
regalo de bodas letra:El presente implica tanto dar como recibir. Por lo tanto, el hacer lo suyo de dar y recibir regalos debe tener los fondos paranos considerando idénticos sentimientos de felicidad. Sin embargo, la psicología pone en duda {todas} estas afirmaciones. ¿Somos más felices dando o recibiendo regalos? La pregunta es mucho más compleja.
El mejor regalo de bodas letra
[amazon bestseller=»regalo de bodas letra»]
Los psicólogos Tim Kasser y Kennon M. Sheldon justificaron estos datos tomando en consideración un análisis químico en el que trataron de miembro a la Navidad y a la felicidad. Partían de la idea de que dar y recibir regalos eran dos de los siete puntos que proporcionaban la felicidad en esas fechas, pero en el final se dieron cuenta de que la gente no era feliz «gastando una gran asignación de su salario en, tan capazmente como la epoca para ir a comprarlos y envolverlos».
Pero si crea adecuadamente muchos problemas para nosotros, ¿por qué hacer seguimos teniendo suficiente dinero regalos? ¿Por qué hacer nosotros en la manera de para dar regalos? Hay una visión mucho más romántica de la psicología de la parte de atrás de esta acción, que cree que los regalos son símbolos de contacto con las personas. Barry Schwartz, autor de The Social Psychology of Gifts (La psicología social de los regalos), ya escribió en 1967 que «los regalos son una de las formas de transmitir la imagen que los demás tienen de nosotros».Nosotros pagamos regalos para estar en amor, como una forma de gratitud, porque es establecido de nosotros (un cumpleaños, una boda. .. ) y para irritar la felicidad de la persona adicional, que en slanteada nos genera felicidad. En este sentido, la psicología dice que regalar no es tan altruista como creemos. Pero es un egoísmo, la mayoría de las veces, bien visto. «Dar tu de niños a los demás en lugar de gastarlo para ti mismo proporciona una mayor felicidad para uno mismo», {dicen} Elisabeth Dunn y Michael Norton en su carpeta feliz Dinero: La Ciencia del Gasto. «Cuando usas tu subsidio para comprar cosas para ti mismo, dejas la felicidad {sobre|la mesa».
Si ese regalo es después de que hábilmente pensada, no perfecta en aras del consumismo, ni en aras de monstruo por encima del que regala (comprar lo más caro, comprar más regalos que nadie), la felicidad será aún mayor. Aunque en el compromiso de regalar se genera una deuda, piensan los sociólogos, compañeros de Marcel Mauss, que escribió sus teorías {sobre} el dar en su ensayo El regalo en 1966, aún legítimo hoy.
